miércoles, 7 de marzo de 2007

Los Alumnos de Primaria hacen un "Show solo para Mujeres" y cobraron







Los Directores y maestros se cierran a
la realidad de los estudiantes, el sexo




Oscar Treviño Jr.
En el interior de una gran parte de las escuelas primarias y secundarias suceden situaciones extremadamente graves cuyos inspectores, directores y maestros ocultan pero que tampoco toman medidas para evitarlas.
"De cada generación de estudiantes de Secundarias Técnicas y Generales entre tres y cinco adolescentes están embarazadas", dicen Eleazar Cartas Sánchez y José Luís Vázquez Lamas, encargados del programa ‘Camino Seguro a la escuela’, de la Secretaría de Seguridad Pública.
"Hay mucha actividad sexual entre los estudiantes de nivel medio y los maestros se niegan a aceptarlo", dice Bertha Carolina Gloria Jonás del Centro de Orientación y Apoyo a la Mujer –COAM-.
LOS EJEMPLOS
"En una escuela primaria a un niño se le ocurrió cobrar a sus compañeritos, por hacer en el baño un 'show de sólo para mujeres' –cuentan los policías encargados del Programa de Camino Seguro a la Escuela- y lo peor es que varios pagaron y vieron el 'espectáculo' niñas y niños".
"En otra primaria dos alumnos de segundo año: un niño estaba encima de una niña simulando hacer el amor", dice Gloria Jonás.
EVITAN EMBARAZOS
Bertha Carolina Gloria es contundente al explicar: “por una falta de información las adolescentes para evitar embarazos y enfermedades venéreas están sosteniendo sexo anal”. Ambos autoridades en su área, aseguran que los directores de las escuelas toman a la ligera estas situaciones.
Cada secundaria tiene un lugar ya sea el baño, una casa abandonada o algún punto estratégico en donde los estudiantes se dan cita para sus escarceos amorosos, para curiosear con alguna droga.
Cartas, Vázquez, Gloria Jonás pertenecen al Comité de Prevención y Tratamiento de Conductas Infantiles y Juveniles Antisociales.
LO SABEN
Los representantes de los 22 organismos gubernamentales y no gubernamentales que conforman en Comité insisten en que los maestros no han adquirido una responsabilidad dentro de su esfera de competencia.
"Es decir, hacen como que hacen". Dentro del Comité hay representantes del programa "Seguridad Escolar" del departamento de Desarrollo Regional de la Educación pero estos últimos también niegan que se susciten situaciones tan graves.
LA PROPUESTA
Bertha Carolina Gloria, explica que los directivos y maestros de las escuelas no aceptan la realidad, prohiben el uso de preservativos y suspenden a los estudiantes que los llevan en sus bolsillos.
"Las adolescentes deben tener información sobre las pastillas anticonceptivas, sobre el condón femenino y los jovencitos orientarlos en dónde compren sus preservativos. Los maestros deben quitarse la venda de los ojos y actuar", concluyó.

martes, 20 de febrero de 2007


*.- Para Matamoros las fiestas son una tradición, mientras que para los de Brownsville, Texas se denomina "Día del Charro".

*.- Paradogicamente quiennes vistes de charro son los anglosajones y los matamorenses que tienen tinero usan "la cuera tamaulipeca".


*.- Las artesanías siguen siendo un arte.

Oscar Treviño Jr.
Una gran parte de los mexicanos apenas ve un tamarindo y se “hace agua la boca” y más si a un lado está el chilito en polvo.
En las Fiestas Mexicanas que comprenden del 17 al 25 de este mes, en la plaza Miguel Hidalgo y Costilla entre cientos de comerciantes, se ubica a Gonzalo Murguía García, originario de Plan de Río, estado de Veracruz.
En un espacio de dos por dos metros, tiene un diminuto anuncio que indica: “Tamarindo de Xalapa, Veracruz”.
Don Gonzalo vende un platito de plástico con tamarindo bañado de chile piquín en polvo y dos pequeñas rebanaditas de limón a 15 pesos o una bola cubierta de plático en 30 pesos –dos euros ó tres dólares-.

EL PROCESO

El comerciante en pequeño explica que los tamarindos son de cosechas tiernas que en Veracruz contratan a familias enteras para que se dediquen a pelarlos. Una empresa se encarga de llevarse la pulpa de tamarindo y lo hornea para de esa manera evitar los conservadores.
Gonzalo Murguía, explica que ahora mismo tiene 30 kilos de tamarindo en una bandeja para venta al público –muy antojadizo-, porque basta con ver damitas, niños y adultos como enjuagaban la boca para preguntar por el precio.
El veracruzano explica que asiste a las ciudades en donde se celebren fiestas como Miguel Alemán, Díaz Ordaz, Nuevo Guerrero y hasta Ciudad Victoria.
“Todas las ciudades son bonitas, pero la mejor es Xalapa”, dice Gonzalo con orgullo.

LAS FIESTAS

Para Matamoros se celebra “Las Fiestas Mexicanas” y para Brownsville, Texas se llama “El Día del Charro”: ambos alcaldes se dan el abrazo de buena vecindad a pesar del muro de la vergüenza y del mal trato de los indocumentados mexicanos en Estados Unidos.
Ambas ciudades pese a pertenecer a distintos países tiene una cultura muy similar, tan es así que las familias contraen nupcias o viven en unión libre o son novios. Es común ir a las tiendas de Brownsville como que los gringos vienen al lado mexicanos en busca de médicos, vinos y cervezas porque para ellos son baratos en virtud del cambio monetario a dólares.
Paradójicamente los matamorenses no visten ni de charro y lo que tradicionalmente en la celebración consistía en la venta de antojitos mexicanos, la mercancía con Brownsville obliga sin pretenderlo a la comida rápida como dicen ellos “snak”.
También se venden dulces maravillosos como los de calabaza, las cocadas, los corazones de leche quemada con nuez al centro, “las glorias”, los dulces de membrillo, entre otros clásicas golosinas mexicanas.


EL TAMARINDO

El origen del tamarindo: nativo de África, y hoy día plantado en todos los trópicos y subtrópicos, donde ha llegado a naturalizarse, llega a medir hasta 20 metros de altura y es de tronco rugoso con corteza gris.
El fruto es una vaina de color café de forma alargada o curva de 2 a 6 pulgadas de longitud y 0,75 a 1,0 pulgada de ancho.
Los estrechamientos parciales de la vaina muestra el número aproximado de semillas contenidas en cada fruto.
Los hay de sabor ácido a dulce según la variedad. La pulpa de un fruto joven es muy ácida, y por lo tanto recomendable para muchos platillos, mientras que los frutos maduros son más dulces y pueden ser utilizados en postres, bebidas o como botana.
La pulpa del fruto, tiene un variado número de usos, que van desde la preparación derefrescos, confitería, conservas, salsas, hasta como medicina natural.

TODO SE USA
La pulpa se usa extensamente en la cocina del sur de la India y para la preparación de refrescos, confituras y helados a través de las áreas de distribución natural y artificial de la especie.
Las hojas, las flores y a veces las semillas se usan también en recetas de cocina.
También se vende como un dulce en México, Venezuela y en muchas variedades de botanas en el Sureste de Asia (secos y salados, secos y endulzados, como bebida, paleta).
Las semillas molidas se pueden usar como forraje para el ganado y pueden ser preparadas para ser usadas en la estabilización de alimentos procesados y para la conversión de jugos de frutas en jaleas.
Las semillas, molidas, hervidas y mezcladas con goma, producen un cemento fuerte para la madera.

LA SEMILLA

Las semillas se usan también para producir un aceite de color ámbar para lámparas de
aceite o para la preparación de pinturas y barnices.
Las hojas producen un tinte rojo, el cual se usa para dar un matiz amarillo a las telas previamente teñidas con añil.
Los monos adoran los frutos maduros de tamarindo.
La madera del Tamarindo es muy dura y pesada, fuerte y fibrosa, difícil de trabajar y sujeta a rajarse durante el secado; sin embargo, la madera toma un buen pulido.

LOS CLIENTES

Don Gonzalo dice que tiene clientela de los Estados Unidos y que desde el sábado que se dieron cuenta que ha llegado a Matamoros, han decidido comprar una buena dotación porque conocen el sabor.
“Algunos han tenido dificultades en el Puente Internacional porque lo oficiales gringos, dicen que no está permitido el paso de la semilla del tamarindo, pero yo digo que esa semilla ya no sirve para sembrar porque fue horneada.”, dice muy convencido el comerciante.
Garantiza que el tamarindo puede durar hasta tres meses guardado en la nevera, aunque si se le echa limón durará un poco menos.
Mientras conversábamos, se acercaba los clientes potencias: uno se llevaba un platito con el tamarindo bañado en chile piquín de polvo y las rebanaditas de limón.